OVNIs: Horizontes de una nueva disciplina científica y posibles cambios de paradigma

Alejandro Réan
7 min readMay 20, 2021

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A partir de la finalización del plazo de 180 días para la redacción de un informe consolidando toda la información que las fuerzas militares tienen hasta la fecha sobre OVNIs (UFOs en inglés), realizado por la fuerza de trabajo UAPTF (con dependencia del Departamento de la Marina de Estados Unidos), y que debe ser presentado a los miembros del Congreso estadounidense, en los últimos días se trató el tema en varias cadenas de noticias nacionales de dicho país (NBC, Fox News, CNN) y también en algunos de los más vistos talk shows nocturnos (Jimmy Kimmel Live!, The Late Late Show with James Corden), así como en periódicos reconocidos (NBC News, The New Yorker, The New York Times).

13 minutos sobre lo desconocido

El segmento más extenso y con notable esmero periodístico fue el realizado por el programa 60 Minutes, transmitido el último domingo por la cadena CBS en horario prime time. En este segmento de aproximadamente 13 minutos de duración (con contenido adicional que se puede visualizar en la web del programa), los pilotos Cmdr. Dave Fravor, graduado del programa TOPGUN y quien comandaba el escuadrón de F18, y Lt. Cmdr. Alex Dietrich, ambos testigos del caso Nimitz (2004), relatan lo sucedido durante uno de los entrenamientos sobre el Pacífico cuando entraron en contacto con “múltiples vehículos aéreos anómalos”. Según cuentan, sobre el agua, divisaron un “objeto blanco, pequeño, con forma de Tic Tac” que se desplazaba con movimientos y trayectorias impredecibles.

Navy pilots recall “unsettling” 2004 UAP sighting. CBS Interactive Inc.
Lt. Cmdr. Alex Dietrich en la entrevista que le realizó Bill Whitaker para 60 Minutes. Crédito: CBS Interactive Inc.

Dicho segmento desencadenó un efecto dominó de notas y entrevistas en otros medios en las que entrevistaron a los principales referentes que hicieron público material filtrado de estos fenómenos, los cuales las fuerzas militares del país con mayor gasto en tecnología militar no puede identificar como objetos o fenómenos conocidos, y de tener que reconocer que se trata de tecnología avanzada de un enemigo geopolítico, significaría quedar en ridículo ante todo el mundo. Incluso el ex-presidente Barack Obama, quien siempre evadía y hacía bromas cuando le preguntaban sobre OVNIs y aliens, respondió esta semana a la pregunta con un tono más sombrío: “Existe metraje y registros de objetos en el cielo que no sabemos exactamente qué son… no podemos explicar cómo se movían, su trayectoria. Todavía hay gente que investiga seriamente y trata de descubrir de qué se trata.”.

Apatía y descrédito de un fenómeno ahora confirmado como real

De todas formas, aún teniendo el tema tanta exposición en los medios tradicionales y de gran exposición estadounidenses, parece que tanto en el público como en la comunidad científica y de periodismo de divulgación locales y del resto del mundo, no tuvo mayores repercusiones. Esto puede deberse al cansancio de ver noticias en tono de burla o producidos sin esfuerzo para rellenar espacio televisivo durante tantas décadas, videos amateurs de mala calidad que incluso no pueden identificar el pasaje de satélites de Starlink o la Estación Espacial Internacional, o también porque los gobiernos y los medios se encargaron durante 70 años (desde el notable caso Rosswell) de ridiculizar el tema y relacionarlo con fenómenos paranormales, los cuales la ciencia nunca se volvería a encargar de tomar en serio, ya que forman parte de la tóxica pseudo-ciencia.

Michio Kaku es un físico teórico estadounidense, destacado en el estudio de la teoría de cuerdas. En una entrevista reciente reconoció que “no se debe descartar la posibilidad de que haya visitas extraterrestres”.

Pasaron muchísimos años hasta que unos pocos científicos y miembros reconocidos de la comunidad académica se animaron a hablar públicamente del tema, siendo excepcionales los casos recientes de Michio Kaku y Avi Loeb que lo hacen objetivamente desde sus respectivas disciplinas, considerando la existencia y presencia, no sólo de los OVNIs, ahora confirmados como un fenómeno real, sino también de seres pertenecientes a una civilización no-humana, como una posibilidad.

FANI: el fenómeno post-2000

El término OVNI (Objeto Volador No Identificado) en inglés se traduce como UFO (Unidentified Flying Object), y su denominación fue cambiada a UAP (Unidentified Aerial Phenomena) hace unos años, según el comentario que realizó Hillary Clinton en 2016 durante su campaña para la presidencia en una entrevista. En español, UAP se traduciría a Fenómenos Aéreos No Identificados (FANI).

“Ahora tienen un nuevo nombre (…) UAP, esa es la nueva nomenclatura.” — Hillary Clinton, 2016. Crédito: Justin Sullivan/Getty Images

Es importante destacar el cambio de denominación de objetos a fenómenos desde el punto de vista de la ciencia, ya que al estudiar un objeto, el científico tiene la necesidad de estudiarlo como tal, en posesión de un objeto OVNI su estudio se vuelve más trivial, se tiene un sustento físico que medir, pesar, analizar. En cambio un fenómeno, es algo más complejo, puede o no ser un objeto, pueden ser muchos objetos, puede ser la proyección de un objeto, o incluso algo que no se puede objetivar.

Si alguien tiene en posesión material o una nave que produce los FANI, quizás lo descubrirán los senadores del Congreso estadounidense una vez sean instruidos y finalicen la lectura del informe producido por la UAPTF, que tiene como fecha límite el 1ro de junio de este mismo año. De concluir que no tienen conocimiento de que se tenga en posesión por parte de algún grupo compartimentado del gobierno o una corporación privada un material u objeto de este tipo, confirmado bajo supervisión de la inspección general del Departamento de Defensa, no significa que no tenga sentido continuar investigando el fenómeno.

La evidencia y el origen del último movimiento de divulgación

Hasta el momento, las fotos y los videos hechos públicos a partir de un movimiento de divulgación iniciado en el 2017 por diversos ex-empleados del gobierno e investigadores y documentalistas del fenómeno, son material no-clasificado filtrado de grabaciones realizadas por dispositivos/sensores instalados en portaviones y aviones jet de la marina durante entrenamientos en las costas del océano Pacífico.

GIMBAL, captura de un FANI. Crédito: DOD/U.S. Navy/Inside Outer Space

Los casos que fueron divulgados abarcan distintos períodos entre el 2004 y el 2019, los cuales según testimonios de los mismos oficiales que piloteaban los jets y controlaban desde tierra los distintos dispositivos de radar y tecnología de visión nocturna/infrarroja, se repetían diariamente al menos por un par de años, con múltiples testigos adicionalmente a las detecciones realizadas por los sensores tecnológicos.

Se especula que el movimiento de divulgación del material filtrado en los últimos 4 años ya confirmado por el Pentágono, la Marina y el Departamento de Defensa de EE.UU. como real, analizado y considerado como no identificado, comenzó en el año 2017 como iniciativa del ex-senador y ex-vicegobernador de Nevada y ex-líder de la mayoría del senado Harry Reid, quien confirmó el año pasado en el documental The Phenomenon que el gobierno estadounidense mantuvo en secreto las investigaciones que realizaba acerca del fenómeno. En ese mismo año, un artículo del New York Times de la autoría de Helene Cooper, Ralph Blumenthal y Leslie Kean, develó los resultados de una investigación periodística que puso el fenómeno nuevamente en foco y de forma seria, luego de décadas de secretos y proyectos gubernamentales clasificados.

De izquierda a derecha: John Podesta (ex-consejero presidencial), Barack Obama, Bill Clinton y Harry Mason Reid. Crédito: Amazon.com, The Phenomenon.

Los tres videos correspondientes a los casos sucedidos en 2004 y 2014/2015 fueron filtrados por Christopher Mellon, quien trabajó como asistente designado de la Secretaría de Defensa de Inteligencia bajo los gobiernos de Bill Clinton y George W. Bush. En los mismos, se pueden detectar ciertas características denominadas los 5 observables, término acuñado por Luis Elizondo, quien estuvo a cargo de un pequeño grupo de investigación del fenómeno (AATIP), supervisado y débilmente financiado por el Departamento de Defensa, ahora desclasificado. Estas características particulares que se pueden identificar en los fenómenos catalogados como UAP (FANI), describen objetos que parecen ser controlados por alguna forma de inteligencia, y poseen habilidades aerodinámicas que sobrepasan cualquier tipo de tecnología aérea conocida.

Perspectivas de una nueva disciplina científica

Rizwan Virk, fundador de Play Labs del MIT, en un artículo publicado en la sección Think de NBC News, se pregunta por qué Silicon Valley y la academia no se toman en serio el fenómeno, considerando que representa una oportunidad para avanzar la ciencia y la tecnología. Es un artículo de lectura más que recomendada, sobre todo para quienes trabajan o estudian en el campo de la investigación y el desarrollo tecnológico.

Rizwan Virk, fundador de Play Labs (MIT) y autor de The Simulation Hipothesis. Crédito: @ Rizstanford (Twitter)

Tal como comenta Michio Kaku en esta entrevista a TMZ, actualmente ya se cuenta con tecnología suficiente para detectar y hacer pruebas experimentales sobre estos fenómenos con los que se encuentran frecuentemente, y a lo largo de todo el mundo, tanto pilotos militares como pilotos de líneas areas comerciales. Esto podría abrir las puertas a una nueva disciplina científica, experimental, para abordar el fenómeno.

Quizás en menos de dos semanas, de ser presentado a tiempo el reporte de la UAPTF al Congreso de los Estados Unidos, nos enteraremos que esas puertas ya fueron abiertas, y se pueda alcanzar más rápidamente un nuevo paradigma.

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Alejandro Réan

Founder @ inWer Crypto Capital. Ciencias de la Comunicación (UBA). Autor de Smartjob (Kindle). Podcast: Condensador de Datos (Spotify)